04 diciembre 2014

NADA - CARMEN LAFORET (3)


(Sexta impresión- octubre 2012)
--


Lectura colectiva
de la novela NADAde Carmen Laforet,
 BLOG 'LA ACEQUIA'

--

Primera parte
Capítulo V

Pág.109[Las fiebres] ...desaparecieron antes de que nadie hubiera pensado en llamar al médico
Pág.111[...]conseguí relacionarme con un grupo de muchachos y muchachas compañeros de clase
[...]Pons, el más joven de nuestro grupo....
[...]Ena se reía de ti con mucha gracia. Decía que eras ridícula...
...Ena era mi preferida...
[...]El primer día de curso me había preguntado que si yo era parienta de un violinista célebre
Pág.113[...]Yo quiero que me presentes a tu tío...
Pág.114[...]A Román no se le veía por la casa....
...Él volverá. Él nunca deja de volver....¿verdad Trueno?No hay que preocuparse




Estación de Puigcerdá
(fotografía de internet)

[...]-He estado corriendo algo por el Pirineo- dijo Román- he parado unos días en Puigcerdá, y naturalmente he ido a visitar a una pobre señora ...... 
- Si te refieres a la mujer de don Jerónimo, del jefe de mi oficina...
...me refiero a la pobre señora Sanz 
Pág.117[...]Yo creo que he perdido el gusto por lo colosal. El tictac de mis relojes me despierta los sentidos más que el viento en los desfiladeros...Yo estoy cerrado –concluyó.
Al oírle estaba yo pensando que no valía la pena de hablar a Román de que una muchacha de mi edad conociera su talento. 

Capítulo VI
Pág.118[...]El día de Navidad me envolvieron en uno de sus escándalos...


-fotografía de internet-


Pág.119[...]un pañuelo de magnífico encaje antiguo que mi abuela me había mandado el día de mi primera comunión.
124[...]Además a mí eso no me parece importante.
Pág.126[...]Él, Román, capaz de fisgar en mis maletas y de inventar mentiras y enredos contra un ser a quien afectaba despreciar hasta la ignorancia absoluta de su existencia.



Flor de Pascua


Así acabó para mí aquel día de Navidad, helada en mi cuarto y pensando estas cosas.

Capítulo VII


Pág.129[...]como quiero comulgar mañana
 Pág.136[...]¿No te he contado la historia del dios Xochipilli, mi pequeño idolillo acostumbrado a recibir corazones humanos? Algún día se cansará de mis débiles ofrendas de música y entonces...
[...]le ofreceré Juan a Xochipilli, le ofreceré el cerebro de Juan y el corazón de Gloria...
[...]Tu hermoso y ordenado cerebro quizá fuera mejor...
[...]La risa de Román me alcanzaba, como la mano huesuda de un diablo que me cogiera la punta de la falda...
[...]husmear mezquino, sin respeto a la vida de los demás...empezaba a sentir contra Román una repulsión indefinible.
[...]Los ojos de Román estaban sobre los míos:"No necesitarás nada cuando las cosas de la casa te agarren los sentidos"
[...]Me pareció un poco aterrador este continuo rumiar de las ideas que él me había sugerido. Me encontré sola y perdida debajo de mis mantas. Por primera vez sentía un anhelo real de compañía humana. Por primera vez sentía en la palma de mis manos el ansia de otra mano que me tranquilizara[...]



Pág. 137[...]Entonces el timbre del teléfono, allí, en la cabecera de la cama, empezó a sonar.[...]Era Ena, que había encontrado mi número en el listín de teléfonos y me llamaba.

Capítulo VIII

Pág.144 [Angustias]...me explicó que volvía al convento donde había pasado aquellos días de intensa preparación espiritual. Era una orden de clausura para ingresar en la cual hacía muchos años que estaba reuniendo una dote y ya la tenía ahorrada...
-¿Siempre has tenido vocación?
-Cuando seas mayor entenderás por qué una mujer no debe andar sola por el mundo.

Pág.145[...]Tú me has fallado, me has decepcionado [...] Sólo me resta rezar por ti, que ¡bien lo necesitas!, ¡bien lo necesitas!
Luego me dijo:
-¡Si te hubiera cogido más pequeña te habría matado a palos!

Capítulo IX
Pág.149[...]¿Y aquel pretendiente tuyo, aquel Jerónimo Sanz por el que estabas tan loca?¿Qué se hizo de él?
Pág.150[...]su feísimo gorro de fieltro....
[...]cartas de amor que recibe, ni su diario[...]¡Qué cartas tan sentimentales y que diario tan masoquista! Satisfacía todos mis instintos de crueldad leerlos.
[...]-Parecen días de entierro ¿eh?-gritó Antonia desde su cocina.
[...]Gloria me dijo que don Jerónimo y Angustias se veían todas las mañanas en la iglesia, que ella lo sabía bien[...]
[...] El niño, espantadizo, se agarraba al cuello de Juan. No le sacaban de paseo casi nunca
Pág.152- ¡Eres una mezquina!¿Me oyes? No te casaste con él porque a tu padre se le ocurrió decirte que era poco el hijo de un tendero para ti...¡Por esooo! Y cuando volvió casado y rico de América lo has estado entreteniendo, se lo has robado a su mujer durante veinte años...y ahora no te atreves a irte con él porque crees que toda la calle Aribau y toda Barcelona están pendientes de ti...¡Y desprecias a mi mujer! ¡Malvada!¡Y te vas con tu aureola de santa!
Pág.152 [Juan][...]y se reía satisfecho. La vuelta a casa fue una calamidad.
---
Niccolò Paganini
Violín Sonata Nº 6
(Gil Shaham)
---



---


MIS OTROS BLOGS:

12 comentarios:

Pedro Ojeda Escudero dijo...

De pronto me ha saltado a los ojos, gracias a tu entrada, la importancia de esas pocas frases o acciones con las que Antonia subraya lo que pasa en la casa...

Cuspedepita dijo...

Me encanta releer libros que ya hace años que leí. Creo que ha llegado la hora de hacerlo con este :-)

Un abrazo

Abejita de la Vega dijo...

Suena el negro teléfono, es Ena que ha encontrado el número en la guía. Y Andrea que no quiere mezclar los dos mundos en que se desarrolla su vida.

Angustias es un tipo de mujer educada en las más rancias tradiciones, es una bruja clasista víctima de sí misma. Se deja decir que si llega a coger a Andrea la mata a palos. Energúmena odiosa. El libro provoca sentimientos. Empatizamos con Andrea y,,,con ese niño que vive encerrado en el piso caótico; por no tener ni nombre tiene.

Un abrazo, Gelu.

Amapola Azzul dijo...

Eres increíble, besos Gelu, lindo trabajo, buen finde¡¡

PENELOPE-GELU dijo...

Buenas noches, profesor Ojeda:

Antonia no es un personaje simpático. Su papel, queda bien definido en la novela.

Un abrazo.

PENELOPE-GELU dijo...

Buenas noches, Cuspedepita:

Te echábamos en falta y celebramos tu vuelta al blog.
Una relectura siempre nos aporta datos, y a veces más preguntas y ganas de saber.

Un abrazo.

PENELOPE-GELU dijo...

Buenas noches, Abejita de la Vega:

Andrea llega a la casa cargada de ilusiones. Esos años fueron represores para hombres y mujeres. Angustias, es una mujer trasplantada. La ciudad, llevaba años de ventaja a las costumbres de otras provincias. Fíjate en las gentes que vivían en la que tú y yo sabemos.
La protagonista tiene -por fuerza- que separar el mundo de sus compañeros y el de sus familiares.
A ese niño, dan ganas de cogerlo en brazos y bajarlo al sol.

Un abrazo

PENELOPE-GELU dijo...

Buenas noches, Amapola Azzul:

Me alegra que pases por aquí y que te guste lo que ves.

Un abrazo.

pancho dijo...

Me encanta el rótulo de "fotografía de internet", que a veces yo también lo uso cuando no sé de dónde la cogí. Es como poner: tomada de la enciclopedia universal de todos los saberes o algo así.
Detrás de ese teléfono parece oírse la voz de la operadora poniendo la conferencia de larga distancia.
Excelente selección que hace recordar la lectura ya algo alejada.Los detalles de las cosas qué pronto se olvidan.
Un abrazo.

PENELOPE-GELU dijo...

Buenas noches, pancho:

Ay, el olvido involuntario de los detalles!, pero al menos –con la escritura, por ejemplo- procuramos poner los medios para que no sean tan rápidos y visibles y nos borren lo que más queremos guardar en la memoria.
Enlazo ‘Violin gitano’.

Un abrazo

Paco Cuesta dijo...

Algunas situaciones como la marcha de tía Angustias a un convento parecen estar fuera de lugar. Como que no encajan.

PENELOPE-GELU dijo...

Buenas noches, Paco Cuesta:

Seguramente era uno, de los varios recursos que se aprecian en la novela, para pasar la censura.
Y, en el Capítulo VIII, el detalle de Angustias de haber ahorrado el dinero de la dote para entrar en un convento de clausura.

Abrazos.